TESTIMONIO #069
Hola, buenas tardes:
Mi nombre es Sonia y quiero dar la gloria a Dios porque he sido renovada en mi vida después de la Misa de Misericordia.
Tenía 1 año de estar en un estado de angustia y depresión tremendos. Esto se manifestaba en forma de alergia y picores por todo el cuerpo, y gracias a Dios, a través de esta Eucaristía empecé a sentir un torrente de paz y alegría como hace tiempo no tenía.
Muchas gracias por traer a Dios a nuestras vidas, por mostrar su poder sanador y hacernos sentir hijos amados de Él.
He estado leyendo los testimonios de la página web y me han impactado sobre todo las profundas vivencias de algunas personas. Ya me gustaría poder expresarme así, con esa soltura y experiencia de Dios.
Al leeros he buscado a ver si teníais un apartado de formaciones, pero no lo veo. Mi pregunta es si podéis hacer formaciones abiertas al público. Somos muchos los que estamos cansados de las mismas cosas en la Iglesia Católica, a la que quiero mucho, pero solamente dan charlas que al final no nos llevan a un encuentro con el Espíritu Santo.
He estado asistiendo muy seguido al grupo de Nueva Jerusalén, pero no veo crecimiento, no puedo hacer nada ni para mí, ni para otros. En vosotros veo los frutos. Os sigo de cerca y veo claramente cómo avanzáis. Me gustaría aprender y tener experiencias como las que se describen en algunos testimonios de los que he leído; no quiero nombrar a nadie, porque no quiero hacer distinciones, pero hay unos testimonios aquí muy profundos que me han sembrado ese gusanillo de querer vivir lo mismo, aunque las experiencias son personales, yo quiero saber más de Dios, conocerlo y ¿por qué no? sentir que Él es mi Padre como lo dice algún testimonio. Seguramente tengo ese espíritu de orfandad que me tiene atada y no me deja ver para qué Dios me creó.
Os dejo esa inquietud por si os animáis a hacer formaciones para gente nada formada como yo. Dios os bendiga. Decir también que la alergia se ha ido. Gloria a Dios.
Gracias. Un saludo.
Sonia.