TESTIMONIO #176
«Ahora puedo disfrutar de cada flor; de cada pajarito. Ahora escucho todos los sonidos.»
Qué importante es que los cristianos nos lo creamos, que en el mundo no estamos solamente para consolar, sino para transformar, para traer el Reino de Dios a la Tierra. Si simplemente todos hubiesen pensado, empezando por ella, que solo se la podía consolar, a lo mejor ella ya no estaría aquí.
Yo creo que el Señor nos invita a todos a luchar por la vida siempre, y siempre y cuando sea todo para su Gloria. Pero no sabemos cuándo Dios quiere a alguien concederle más tiempo. Y que todo ese tiempo sea para bendecirle, para darle gracias; como ella dice, que ahora sabe apreciar todas las cosas, hasta las más pequeñitas.
Compartimos contigo este testimonio tan especial:
Te damos gracias, Señor. Te alabamos y te bendecimos, porque nos permites ver tus signos. Señor, te damos la Gloria y la honra, porque Tú estás vivo en medio de nosotros, en medio de tu pueblo.
Amén.