Ir más allá

TESTIMONIO #136

Hermanos, acabo de ver el reel del Retiro de Renovados en el Espíritu en Facebook. Les he buscado por esta página y me ha encantado.

Aquí en México la Renovación Carismática está muerta, no sale del uno y el dos.

¿Habrá alguna posibilidad de traer esta Comunidad de Somos hijos de Dios a México? Parece ser que es dirigida por un sacerdote y eso me encanta. Porque el problema de la Renovación es que son los laicos, y yo como laica veo que necesitamos la dirección de un sacerdote.

Me gustaría saber más de este Retiro. ¿Habría alguna posibilidad de hacerlo en México?

Dios los siga bendiciendo y sigan proclamado las buenas nuevas. Pero deberían plantearse ir más allá. Somos muchos los sedientos y necesitamos de una fuente segura para beber. Ya que al final de los tiempos habrán muchos falsos profetas.

Padre Salvador, ¿va a hacer usted retiros online? Eso he visto en Instagram. Yo le animo a que los haga presenciales por el mundo mientras se pueda. Estaré pendiente de los retiros online para apuntarme mientras los veo venir por México.

Muchas gracias.

Gloria a Dios.

Fue algo indescriptible

TESTIMONIO #135

Tengo que dar gracias a Dios por todo lo vivido este fin de semana.

Llevo 30 años en la Iglesia. En su momento me ayudaron muchísimo, pues iba buscando algo que me llenara más… y encontré a Somos hijos de Dios.

Hemos estado en alguna Adoración; estuvimos también en Pentecostés y ahora, porque Dios quiso (porque no habían plazas), pude asistir al Retiro.

Yo estoy operado de la garganta por un cáncer en una cuerda vocal, que me ha dejado sin voz, y a los 4 años apareció otro en el pecho del que me dieron quimio y radio con todas sus secuelas. Hace 2 años me apareció otra metástasis en la cabeza. Pero bueno, está todo ahí, pero paradito.

¿Por qué cuento todo esto?

Yo siempre he pensado que mi enfermedad es buena para mí, porque viene para mi conversión. Me humilló mucho el no tener voz, pues yo tocaba la guitarra y cantaba como salmista, tocaba el ukelele, y esto ha venido bien para mi soberbia.

Nunca le pedí al Señor que me curara de mi enfermedad, siempre le he pedido que enviara su Espíritu Santo para poder aceptar su voluntad, fuera cual fuera. Por eso, cuando en uno de los momentos del Retiro me vino el padre Salvador y una chica del equipo y me impusieron las manos para hacer oración de sanación, lo que yo sentí en ese momento es que comenzó a convulsionarme el pecho.

Fue algo indescriptible.

Yo no sé si me curé o no, es algo en lo que menos pienso, pues el Señor tiene sus tiempos y a lo mejor el mío es este, solo quiero dar Gloria a Dios por todo lo vivido.

Gloria a Dios y Bendiciones.

El Espíritu actúa

TESTIMONIO #134

A pesar de estar 35 años en la Iglesia, doy fe de que el Espíritu Santo no se me había manifestado físicamente nunca.

Dios tiene sus tiempos y sus caminos, y a través de este Retiro de Renovados en el Espíritu (con la Comunidad Somos hijos de Dios y con el padre Salvador de la parroquia San Ramón Nonato de Paiporta) y después de estar invocándolo y pidiéndole que se manifestara en mí si Él quería (porque le di permiso para que lo hiciera), me invadió un calor en todo mi cuerpo.

Luego se me puso todo el cuerpo a temblar; tenía las manos en posición de oración, juntas, y al mismo tiempo que estaba temblado, empezó una fuerza a separarme las manos involuntariamente, llegando casi a estar en cruz.

Era el Espíritu Santo que estaba testimoniando en mi cuerpo que el Espíritu actúa, que no es sólo la brisa suave que se nos dice; se manifiesta fuertemente y con Poder. Me refiero físicamente.

Todo para Gloria de Dios.

Ha completado el puzle de la unidad

TESTIMONIO #133

Vuelvo del Retiro con tanta paz que hasta me da vértigo.

Anoche se lo dije a Hugo: «Tengo tanta paz que me da igual lo que hagan los niños…»

Pero también vuelvo rebosante de Amor de Dios.

Para mí ha sido un «nuevo clic». He vivido una unidad celestial con cada uno de los que habéis asistido (de las 3 comunidades). A los que no habéis estado, pues también, porque os he tenido en mi corazón.

Era algo que necesitaba, porque muchas veces me he planteado el no conocer a las personas de las otras comunidades… será por el intenso año que me ha tocado vivir, pero era como si me hubiese perdido algo; y el Señor, que es Magnífico y conoce tanto mi corazón, me ha dado esa luz que me faltaba. Ha completado el puzle de la unidad y me ha regalado ese conocimiento que tanto añoraba.

Los «paseos» con Jesús Eucaristía me han tocado; he sentido el estar paseando con un amigo que iba explicándome el porqué de cada uno. No sé expresarlo con palabras, pero ahora tengo una certeza que rebosa mi corazón y me enamora, aún más, de lo que SHD es.

Por otra parte, daros las gracias a todos por ser como sois, por darle vuestro «sí» al Señor, por dejaros transformar, por dejaros ser canales de Su Bendición, por dejaros llamar hermanos.

Os quiero desde lo más profundo de mi corazón.

Laura.

Mi vocación y mi misión dentro de la Iglesia

TESTIMONIO #132

Gracias.

Ayer noche quise agradeceros vuestra oración, porque sentía el efecto que estaba teniendo en mí.

Sólo Dios sabe el esfuerzo que he tenido que hacer para poder asistir al retiro.

Le pedía a El Señor una cosa y me ha dado exactamente lo que necesitaba, que no tiene nada que ver con lo que le pedía.

Tengo más clara mi vocación y mi misión dentro de la Iglesia. Y me ha puesto en bandeja los medios para vivir en su voluntad y llevar a cambio esa misión.

También El Señor se hizo presente con unas palabras preciosas de profecía, que meditando posteriormente, me descubre nuevamente la grandeza del amor de Dios, cómo respeta mi decisión y porque me ama me da la libertad de elegir siempre caminando conmigo y apoyándome.

Jesús está vivo, hermanos.

Confianza, Gloria, alabanza a nuestro Señor.

Fernando.

¡Con signos y portentos!

TESTIMONIO #131

Gracias, el Retiro ha sido un regalo grandísimo, el Señor se ha manifestado con mucha fuerza y me ha confirmado otra vez qué quiere de mí, ¡con signos y portentos!

Gracias a todos los que dais vuestro tiempo y esfuerzo a su llamada, y gracias a Dios.

María Abarca.

La fuerza y el poder del Espíritu Santo

TESTIMONIO #130

Quiero dar mis más sinceras gracias al padre Salva y a todos los hermanos y hermanas por este Retiro. Por su entrega y organización, por sus oraciones y cariño.

Lo he vivido por segunda vez porque sentía esta necesidad de llenarme otra vez de la fuerza y el poder del Espíritu Santo, después de un año muy duro para mí.

He salido muy reconfortada, con mucha paz y muy agradecida.

¡Gloria a Dios!

Que el Señor os colme de las bendiciones por vuestro esfuerzo y sacrificio, por daros tanto al servicio del Señor y al prójimo, por estar allí acompañándonos, por vuestras oraciones y por este deseo ardiente de darnos a conocer el Dios vivo.

Que el Señor os llene de Sus bendiciones.

Mila.

Mensajes de Dios para su pueblo

TESTIMONIO #129

Hola buenas noches:

Agradezco su labor y su entrega. La Adoración al Santísimo de ayer me dejó impresionada. Soy una mujer muy herida y esa palabra que dijo el padre Salvador para la mujer abusada y maltratada era para mí. No dejen de decir los mensajes de Dios para su pueblo. Somos un pueblo enfermo y necesitamos ese amor de Dios visible a través de sus instrumentos. Muchas gracias. Dios siga bendiciendo a esta Comunidad. Les sigo por Instagram y no he vuelto a ver más vídeos. Hermanos por favor no se callen. Son elegidos de Dios para este tiempo de tanta necesidad y confusión.

Dios los bendiga y gracias.

María Elena.

Acercarnos más y más a Él

TESTIMONIO #128

¡Buenos días, hermanos!

Hoy quería dar un testimonio de sanación, se me había olvidado contarlo aquí y el Señor hoy me lo está recordando.

En la Misa de Misericordia que se hizo en Paiporta el 22 de mayo, le dije a Jesús: «Tengo muchas teclas y enfermedades, Tú ya sabes que necesito sanación, haz lo que quieras.» Y lo dejé en sus manos y recibí mucha Paz.

Yo llevaba tomando Omeprazol (un protector gástrico) unos 4/5 años, siempre tenía acidez y mucha comida me sentaba mal, los médicos no me hacían mucho caso y yo intentaba buscar soluciones, eliminar alimentos, remedios naturales, etc.

A la mañana siguiente me levanté y cuando iba a tomarme la pastilla del estómago (lo primero que hacía todas las mañanas) sentí dentro de mí que no debía hacerlo y que ya no me hacía falta, y en Fe dejé de tomarla, esperé un mes y algo para comprobar que no era sugestión mía, ya que no siempre me sentaba toda la comida mal y había épocas menos dolorosas; tras este tiempo, ¡sólo me había molestado el estómago un par de veces! (Y justificadamente… hay una cosa que no debo comer y lo sé.)

Entonces quiero dar Gracias a Dios, que es mi Padre, me cuida y me cura, a toda la Comunidad y al padre Salva, por ser fieles a Jesús, por orar por nosotros, por darnos esta oportunidad de acercarnos más y más a Él.

¡Que Dios os bendiga y os dé el 100×1!

Trae el Cielo aquí

TESTIMONIO #127

Buenas noches, os voy a compartir algo que el Señor me mostró ayer en la Adoración.

Durante un momento en que estábamos cantando «Santo, Santo, Santo» y le pedí a Jesús «Trae el Cielo aquí», sentí en el corazón una respuesta: «Ya está aquí.»

Entonces alcé la mirada y vi al padre Salva que estaba tocando el cajón y la Virgen estaba a su izquierda de pie, y se movió como un poquito, como en medio de los que estaban tocando y cantando. Me llenó de alegría; le pregunté a Jesús: «¿Qué advocación es?», pero no hubo repuesta, yo todo lo que sabía era que Ella llevaba corona.

Pasó el rato, y en otro momento que me incorporé, vi que junto a los que estaban cantando y tocando, ¡estaba la Virgen Peregrina de la Medalla Milagrosa! (que lleva corona).

Fue para mí una confirmación en el corazón, ella, María nuestra Madre, está con la asamblea, dándonos su bendición maternal y sobre todo cerca de la música de alabanza; le agrada y le alegra.

Doy gracias a Dios y a nuestra Madre porque nos regalan siempre pequeños detalles, a mí me ayuda mucho esto en mi fe.

P.D.: Por si alguien no lo sabe, la Virgen Peregrina es una Virgencita que va en una caja de madera y cristal, cada semana custodiada por una familia.